Es verdad, merced a mí Lorelei abrió los ojos. Pues elijo hasta la ropa que ella lleva. Ya antes la señorita era una cursi de gustos horrendos. Ni iba a la peluquería, ni sabía maquillarse… Remozaste, ¿verdad mi vida? Así se aprecia menos que eres 4 años mayor que .
